A) Indicadores económicos: Incluyen medidas económicas, como los gastos en general, pero también tienen en cuenta la duración de los bienes duraderos (electrodomésticos, coches...). Esto último beneficiará a las sociedades que construyan bienes más duraderos, evitando la obsolescencia programada. El PIB en cambio, crece más cuánto más se rompan las cosas. El IPG también tiene en cuenta lo que llama subempleo (desempleados crónicos, a tiempo parcial sin desearlo, etc.), además de la desigualdad de ingresos, y las inversiones netas (deudas y déficit).
Indicadores ambientales: Miden la contaminación del aire, del agua, y por ruido, además de la pérdida de ecosistemas (humedales, tierras de cultivo, bosques...). También se cuantifican los daños del cambio climático (93 dólares por tonelada de CO2), los costos del agotamiento del ozono, y los costos del agotamiento de recursos no renovables. Sin embargo, el actual PIB considera beneficioso el agotamiento de recursos, porque ese proceso mueve dinero.
Indicadores sociales: En este apartado se pretende medir la calidad de vida de las personas. Por tanto, considera positivo y cuantifica actividades que el PIB ignora totalmente: tareas del hogar, cuidados de los hijos, trabajo de voluntariado, valor de la educación, y el uso de infraestructuras. Ahora como algo negativo, mide el coste del crimen, si el tiempo libre disminuye, los gastos familiares para contrarrestar la contaminación (por ejemplo, en China mucha gente compra aparatos purificadores de aire, lo cual es bueno para el PIB, pero demuestra una peor calidad de vida), el coste de los accidentes de tráfico, y el coste en los desplazamientos (pagar el medio de transporte, y por emplear tiempo que podríamos usarlo en otra actividad más agradable o productiva). En general, se trata de valorar como negativas las principales cosas que empeoran la calidad de vida de la gente.
B) España tiene buenos resultados en algunas medidas de bienestar general del Índice para una Vida Mejor. España se sitúa por arriba del promedio en balance vida-trabajo, vivienda, estado de la salud, sentido de comunidad y seguridad personal, pero por debajo del promedio en ingresos y patrimonio, compromiso cívico, calidad medioambiental, educación y competencias, y empleo y remuneración.
En general, los españoles están ligeramente menos satisfechos con su vida que el promedio de la OCDE. Al pedírseles que calificaran su satisfacción general ante la vida en una escala de 0 a 10, los españoles le otorgaron una calificación de 6.4, cifra menor que elpromedio de la OCDE de 6.5.
C) El de SALUD. Ya que el seguro médico de nuestro pais es uno de los mejores, ya que es público y tenemos facil acceso a el, no como en otos paises los cuales son privados y muchos tienen que emigrar para curarse.